Programación televisiva

Cuando veas la televisión fíjate bien que está dividida en lo que se denominan “barras”, la noticiosa, la infantil, la del ama da casa, etc. Los programas de ciertas horas están dedicados a un tipo de público.

Las telenovelas tienen horarios donde se supone que hay un mayor público femenino, el noticiero es o muy temprano o muy tarde, la programación infantil casi siempre es a mediodía.

Más allá de las divisiones en barras ahora hay canales especializados en televisión por cable y por satélite, para niños de historia, de animales, de lo sobrenatural, religiosos, de películas, para adultos, etcétera.

La idea es sostener un público y ahora mediante el pago por evento.

La televisión directa llegaba a la casa sin costo -salvo la luz- pero ahora las nuevas modalidades imponen el pago por evento si uno desea ver algún programa, serie o espectáculo específico.

Así, la televisión se comercializa no solo por la vía de la publicidad sino de los propios clientes.

Por ejemplo, una película se exhibe primero en las salas de cine, luego pasa a los canales de pago, luego a la televisión abierta, en el proceso se pudo vender en CD.

Secreto aparte, la piratería se encargó de difundirla con gran rapidez, desde que estaba en las salas. La piratería es un problema de difícil solución, seguramente hay una bien organizada red donde se facilita el master de la película para “quemarla” y venderla distribuida por los ambulantes. Claro que pierde mucho de la imagen original, a veces no se ve bien, no se ve completa o de plano es una estafa y ni siquiera es la película que ofrece la portada.